Vendo mi alma al primero que pase porque el diablo se olvidó de mí.

Dejad los pretextos, la vida necesita más párrafos.

jueves, 17 de enero de 2013

Taquicardias del día a día.

A veces creo que escribir me da paz, y por eso escribo con tanta frecuencia. O quizás debería hacerlo más... 
A veces creo que lo sé todo, que estoy dentro de cada una de vuestras mentes (en unas más adentro que en otras) y que os escucho pensar. A veces acierto, muchas veces no, y otras miles nunca lo sabré. 
Y a veces sé con certeza que me falta valor y me sobran ganas de querer controlarlo todo.

No siempre escribo cosas que me gusten, pero definitivamente lo hago por algo. Hace poco tiempo decidí dejar de hacer cosas con fines específicos, pero escribir es una de esas cosas que si no tienen un fin, no son nada.
He de recordar cosas que me he dicho anteriormente: la poesía acabó el mismo día que descubrí que no todos los días son iguales.

Karen.




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