Vendo mi alma al primero que pase porque el diablo se olvidó de mí.

Dejad los pretextos, la vida necesita más párrafos.

sábado, 7 de julio de 2012

Depresión respiratoria.

"Tomábamos morfina, diamorfina, ciclocina, codeína, temazepán, nitrazepam, fenobarbital, amital sódico, dextropropoxifeno, metadona, nalbufina, petidina, pentazocina, buprenorfina, dextromoramida, clometiazol... las calles rebosan drogas que puedes tomar para combatir la infelicidad... y nosotros las tomábamos todas. ¡Joder, nos habríamos inyectado vitamina C si hubiera sido ilegal!"*


Suena música... el ritmo sale por los altavoces dando tumbos, cual borracho tras unas copas de más. La voz se rompe, y one breath, one life, one blood...... Casi ni puedo escribir, y las notas hacen de nitrazepam provocando depresión aguda en mi respiración. 
Resulta demasiado fácil escribir sobre lo que no haces, sobre lo que no te pasa, sobre lo que no conoces, lo extraño y lo ajeno... lo que es demasiado sencillo de pensar.... pero ¡tan! difícil para hacerse entender... Me encantan los puntos suspensivos porque nunca sabréis qué significan... ¿verdad? Son pausas, o ¿acaso son silencios significativos? ¿es que estoy pensando? Quizás es la parte que siempre escondo, lo que no se escribe, el secreto a voces de entre mis letras.
Cuando vives, escribir resulta cada día más dificil... y acabas escribiendo sobre escribir. Resulta difícil porque vives tu secreto a diario, y quieres escribir sobre él, pero queda mal... y entonces abusas de los puntos suspensivos y blabla...


Sigue saliendo la misma canción por los mismos altavoces, arrastrándose cual... (jeje) Sigue sonando una y otra  vez, pero no la escucho... Sólo me ocupo de darle al play cuando deja de sonar, cuando muere. 


Recuerda que cuando algo muere de verdad, las cenizas se hacen más fuertes. Pero el tiempo lo cura todo, ¡qué locura!  Recuerda olvidar que pudiste ganar cuando hayas perdido. Arrepentirse es el peor de los errores


Respira, y que haya paz. Karen.


*Trainspotting.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Puedes gritar. O hablar, si lo prefieres.