Vendo mi alma al primero que pase porque el diablo se olvidó de mí.

Dejad los pretextos, la vida necesita más párrafos.

sábado, 16 de noviembre de 2013

"Cuando no es posible ser feliz..."

Probé con etílicos y amarillos, autoayuda, yoga y meditación. Lo intenté con el peligro y contigo. Me arriesgué jugando a ver qué pasaba y perdí. ¡Lo hice todo! -no lo que debería-. Y quizás por eso ya no me queda absolutamente nada que sentir.
Tengo un escorpión ataráxico bajo la piel que me cuenta de cuando tenía alma, de cuando sentía y se emocionaba con cualquier estupidez… Me dice que no está tan mal, que uno se acostumbra a ello. Por no tener, no tiene esperanza (ni nada que perder); sabe que nunca tendrá pesadillas, ni sueños por los que morirse. Pero sé que me ha mentido.
Probaré con lo que sea. Haré cualquier cosa que no quiera hacer, me moriré de miedo y me pondré en situaciones peligrosas; me haré llorar. Porque… he sido de tantas formas, que ya no sé cómo me gusto menos.
Lo probé todo, hasta rendirme –que es lo que mejor se me da-.

El silencio no existe, pero a veces aparece
y, joder, es un cabrón.


Karen.

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